Expediente Juan...Cerrado??.. Segunda Parte

Finales de 2004

Nuestra relación mejoro un tanto pues su sensor machista le dio la alerta de que no estaba siendo tan dependiente de el y que no le necesitaba sexualmente, sin embargo esto le dio poderío y quiso recuperar lo que creyó tener perdido, comenzó de nuevo nuestro cortejo sexual medio subliminal, donde con cortas palabras ambos sabíamos cual era nuestro destino, hasta que se volvió nuestro lenguaje.

Palabras como vamos para la casita come carro o quieres pollo, o tengo ganas de unos chinos eran la clave para que el otro supiera las ganas descontroladas por sexo que el otro tenia, entre estas una muy famosa que nunca he podido olvidar.

El día de la Inundación

Ese día, domingo recuerdo, el me llamo con ganas de verme, desde el viernes se le notaba ansioso y era porque teníamos mas de una semana sin hacerlo, ese fin de semana prometí verlo, pero mi padre regreso de viaje antes de tiempo y mis planes cambiaron. Tenia que idear un plan, no aguantaba ni un día mas sin sentirlo y besarlo, lo necesitaba y urgentemente.

Mi plan era el siguiente, si decía en casa que saldría con John nadie sospecharía y como en mi casa se sabe que John y yo somos inseparables, no habría ningún problema, listo! Ya tenia mi plan, me aliste temprano le llame, llame a John, quien accedió a regaña dientes pero acepto y me dispuse a ir al encuentro de mi amado!!!

Nos encontramos en su casa, fuimos a la casa de la barbie como siempre y me sorprendí al ver, que era el quien ahora preparaba los encuentros, llevo sabanas, vino y copas, todo perfecto para la ocasión, pero no mejor que lo que vendría después, ya era costumbre que nos acopláramos sexualmente cuando nos hacíamos falta pero esta vez fue espectacular, fue la primera vez que disfrute de que Juan me hiciera sexo oral y aunque no tuve orgasmos disfrute su disposición su cariño y todo lo rico de la ocasión.

Ese dia pasaron muchas cosas, buenas como lo que relate anteriormente y malas, como lo que me esperaría al llegar a casa.

En esos tiempos (finales de 2004) las señales celulares no entraban en los moteles y ese día de una lluvia espantosa mi madre se preocupo porque me llamaba y no aparecía. John fue sujeto de múltiples llamadas de mi madre y no pudo satisfacer su curiosidad de saber donde estaba su hija, pero de todo ello yo no tenia conocimiento porque disfrutaba de mi nido de amor por múltiples horas.

El dilema no paro ahí, al salir del motel y escuchar a mi madre histérica me puse nerviosa, todo se puso peor al percatarme de que las calles estaban inundadas y corría el riego de quedarme estancada, por suerte Juan fue inteligente y me guió por zonas mas fáciles, le deje en su casa y pude irme a la mía, en el camino recibía llamadas de mi madre diciéndome del mal que iba a morir, de John amenazándome con nunca mas cubrirme y las calles mas inundadas que nunca.

El camino entero llore pero al llegar a casa, me recibió calidamente una bofetada que mi madre me daba por haberle hecho pasar esas horas de angustia, mis justificaciones fueron inútiles y ese día tuve un muy fuerte regaño.

En fin disfrute la tarde pero la angustia nublo todo ello, lo que venia después fue mucho peor, los controles parentales a los que me vi sujeta no me permitieron responderle a Juan de la manera que el quería ahora que ya teníamos una relación mas estable, todo fue debilitándose y nuestra relación se estropeo mucho.

Cuando el quería yo no podía y se nos limitaba la cantidad de veces que podíamos hacerlos, ya cuando logre obtener cierta libertad el no quería y ponía excusas absurdas para justificar su dejadez ante hacer el amor conmigo, en ocasiones me llamaba ninfomanía y me echaba la culpa de que nuestra relación solo estuviera basada en sexo.

Trate de buscar formas, pero el ya estaba blokeado, solo me mantuve paciente, esperando que la navidad obrara un milagro y salvara nuestra relación.